Skip to main content

Bajo el nombre de ‘Emprendemos contigo’, varios expertos y emprendedores se encontraron esta semana en un acto organizado por el Diario HOY y BBVA con el objetivo de analizar y reflexionar sobre el emprendimiento en España, con especial énfasis en Extremadura. Entre los retos a superar, las ventajas y los inconvenientes destacó, sobre todo, algo en lo que todos coincidieron: la región se encuentra ante una oportunidad de oro.

Juan José Sánchez Infante, responsable del Segmento Pymes Territorial Sur de BBVA, indicó que ya solo con organizar este evento se podía demostrar que el emprendimiento en Extremadura «cala». Y es que la comunidad autónoma se está subiendo a este carro: en 2023 se crearon un 10% más de empresas, una cuestión que se puede tomar de dos maneras desde el lado del emprendedor: por un lado, como incentivo para tener trabajo por sí mismo; por otro, tener la motivación de independizarse «e incluso transformar el mundo».

Según su punto de vista, tanto en España como en Extremadura se tiene cierto miedo al fracaso, al contrario que en la cultura anglosajona, algo que está cambiando. «No hay que tener miedo porque se aprende de las derrotas, no de las victorias. Levantarse, minimizar el error, aprender él y considerar los riesgos a tomar es clave. La ilusión debe permanecer siempre».

Para Sánchez Infante, lo primero que tiene hacer alguien que quiere emprender es desarrollar un plan de negocio: quiénes son los proveedores, los clientes, cómo aumentar ingresos. Y contar con el respaldo de fondos propios, complementado con la financiación bancaria.

Pero, ¿qué hay que hacer para que haya más empresas? Entre otras muchas razones, Sánchez Infante recuerda que la educación financiera —y tener salud financiera— es vital, aunque eso es algo en lo que puede ayudar una entidad bancaria. O incorporarse a la innovación, que aportará al largo plazo de una empresa. Pero que la parte cultural se tiene que hacer entre todos.
«Extremadura es una tierra de emprendedores, empresas y empresarios y de oportunidades que hay que crear. Y creérselo. Queremos que vean al BBVA como el banco que apoya el emprendimiento, la educación y la constancia», afirmó.

Por su parte, Celina Pérez, directora general de Empresa de la Consejería de Economía, Empleo y Transformación Digital, quiso dejar claro que ella jamás será partidaria de «endulzar» el emprendimiento. «Ni de disfrazarlo, ni purpurinas: emprender no es fácil, conlleva riesgos, hay que tener perseverancia y formación».

En la mesa redonda, dirigida por la periodista Celia Herrera, Pérez no se mostró de acuerdo con una de las conclusiones del informe GEM, que indica que en Extremadura se tiene la percepción de que las condiciones para emprender son en esta región peor que en otras comunidades. Es más, considera que son mejores que en el resto de regiones. «Es un sitio idóneo para emprender, con despliegue de incubadoras, programas de formación, tarifa cero, ayudas a la I+D+i, etcétera. Impulsamos iniciativas innovadoras y paliamos la incertidumbre de aquellos que se lanzan a emprender», argumentó.Asimismo, Pérez explicó que la edad media del emprendedor extremeño supera los 35 años. Este hecho contrasta con las políticas de fomento del emprendimiento impulsadas por Europa, dirigidas sobre todo a menores de 30 años. «También hay una desconexión en la educación de la empresa: tanto de los perfiles que se necesitan como desde los estudiantes, que, de verdad, tienen que conocer lo que es una empresa y las empresas que existen en la región, porque no saben que existen. Desde la Junta hemos tomado muy en serio esa conexión entre empleo y empresa y, por otro lado, la educación».En su opinión, Extremadura es el mejor destino para emprender. Y desde la Junta, aseguró, saben que el futuro depende de eso. «Nuestra apuesta es decidida: programas de ayudas e incentivos. Creo que tenemos una situación en idónea para emprender e invertir, nuestras horas de sol, agua embalsada, suelo industrial, mejores porcentajes de ayudas para la inversión… Estamos ante una oportunidad de oro».

Sandra Soriano, directora de Estrategias y Operaciones de la Cámara de Comercio de Badajoz, destacó que en 2023 hicieron más de 1.000 planes de viabilidad a nuevos emprendedores. Hay un interés renovado y, sobre todo, se nota un interés en que el proyecto dure.

Soriano también subrayó que en torno al 70% de los emprendedores son más profesionales, conscientes de su negocio, formados, con visión a largo plazo. Y que el 30% restante es lo que era antiguamente el emprendedor: personas que no encontraban empleo y quieren buscarse su porvenir y necesita salvar una situación. «Es un salto cualitativo y cuantitativo».

«Creo también que todos sentimos que el momento es ahora, que algo surge en Extremadura, que estamos motivados y que nos toca ya. La digitalización, la innovación y la economía verde pueden ser nuestros aliados. Nos lo tenemos que empezar a creer», resumió.

Mónica Pérez es nutricionista y emprendedora desde hace 12 años y recordó lo complicado que resultó el papeleo y la lentitud de la burocracia. En su opinión, emprender no es fácil aunque cada vez haya más ayudas. «Pero hay que ser consciente de que hay que arriesgar, ver cómo se pueden afrontar las situaciones cuando hay pérdidas. Es mucho sacrificio, sin embargo, todo sale bien al final. Trabajando».

Como representante de los emprendedores en la mesa redonda, la nutricionista destacó que un buen asesoramiento es vital para llevar a la empresa al siguiente nivel: todo se puede preguntar, todo ayuda. Consideró también que el principio siempre parece lo más negro —«y eso que no es un camino de rosas en ningún momento, precisamente»— y que el éxito nunca viene al principio. «Asociamos éxito con dinero, y no siempre es así. Solo ver que la idea, lo que habías imaginado, sale adelante ayuda mucho. Soy madre soltera y autónoma y se puede. Pensamos erróneamente que estamos en la cola. Por eso tenemos tanto que avanzar», aseveró.

El triunfo final

En la mesa también participó Gonzalo Murillo, director general de Olivamente y cofundador de Greenfield Technologies, que tampoco cree en la «purpurina». «Parece que solo existe el que triunfa o el que fracasa. Y el que triunfa solo lo hace al final: durante el camino ha tenido muchos microfracasos y muchas noches en vela».

Dedicado al sector de la agroalimentación, para Gonzalo Murillo lo peor fue emprender en la parte tecnológica porque la innovación es algo muy novedoso.

En su opinión, uno de los grandes problemas de la región es la falta de especialización: faltan trabajadores con FP y el tejido empresarial extremeño es el que es. «Tenemos agricultura, ganadería, sectores en auge, pero no hay mucho más porque la gente se ha acomodado a tener un puesto de trabajo fijo», lamentó.

Según su experiencia, la suerte llega al emprendedor trabajando. «Mientras más trabajo, más suerte. Hay una frase que me gusta mucho: la oportunidad de tu vida dura la vida de tu oportunidad. Hay que aprovechar, que no te adelanten. Eso, y rodearse de los mejores, es vital para alguien que quiera emprender».